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urante la crisis sanitaria derivada del Coronavirus, aplausos y ovaciones varias han sido dedicados a los profesionales de la salud recibiendo poco menos que el título de héroes.
Es verdad que sus acciones y trabajo están llenos de valor y servicio a los demás, tal y como ha sido reflejado en los medios de comunicación. Éstos se han hecho eco de parte del esfuerzo y dureza de las condiciones en las que han tenido que trabajar, así como de la escasez de medios para hacer su trabajo de una manera segura. No obstante, las imágenes que hemos visto en televisión siempre han sido la parte más dulce de su trabajo, aplausos y despedidas a los pacientes que habían vencido el coronavirus.
Coronavirus: Sanitarios contagiados y efectos psicológicos
Pero, ¿qué ha sido de la parte más dura, esa que tiene que ver con que en España han muerto alrededor de 30.000 personas en dos meses? En este sentido esta mañana escuchaba en el programa Hoy empieza todo de Ángel Carmona en Radio 3, al reconocido Fotoperiodista español Gervasio Sánchez, hablaba de las trabas burocráticas que él y sus compañeros de profesión han tenido que superar para retratar la realidad que se estaba viviendo en los lugares más afectados, como son las residencias de mayores y hospitales, eso que no se muestra y que por tanto nos hace inconscientes e insensibles a la realidad, infantilizándomos de alguna manera como sociedad.
Por esto y por mi experiencia profesional creo que la historia de lo que han vivido nuestros sanitarios no ha sido del todo contada.
Ayuda psicológica frente al Coronavirus: Caso real
Los dos últimos meses he podido trabajar con estos profesionales que han estado en primerísima línea de batalla y me siento en el deber de contar que lejos de ser héroes con súper poderes capaces de hacer frente al mayor de los enemigos, son personas de carne y hueso que han sufrido más allá de la incomodidad de llevar durante horas un EPI. Creo que éste es mi homenaje particular a todos ellos, pero empezaré por el principio.
Trabajo en el Hospital General Universitarios de Elda (Alicante), dentro del Servicio de Salud Mental y, como a todos, el coronavirus me cogió desprevenida. Muy pronto llegaba a nuestros oídos el nivel de estrés que estaban atravesando nuestros compañeros que combatían día a día al coronavirus. Conocedores de cómo se estaba abordando el COVID-19 en el Hospital La Paz de Madrid, mis compañeros Psicólogos Clínicos y yo decidimos ponernos en marcha para proporcionar asistencia psicológica frente al coronavirus a los Equipos, y cuando digo Equipos me refiero a todo tipo de profesionales y colectivos que dentro del hospital han participado en sacar adelante esta situación, desde Enfermería y Auxiliares, pasando por los Médicos, hasta personal de limpieza y Dirección.
8 Comments
Bonito artículo y cargado de mucha emoción, No pasará desapercibido para nadie que haya estado ahí, al pie del cañón,
Toda la razón, no somos héroes. Frases como estas hacían invalidar tu sentir.
Gracias por poner palabras a tantas y tantas emociones sentidas durante estos dos meses y medio tan duros.
Justo eso que dices Yolanda es lo que me llevó a escribir este artículo, pensaba en vosotros teniendo que cumplir con el papel de héroes, que con la mejor intención se os ha dado, y lo imaginaba como un peso y un esfuerzo más. Gracias por compartir tan de primera mano. Un abrazo fuerte!!
Me ha encantado tu reflexión, los sanitarios sufren, se emocionan y sienten miedo cómo el resto de la poblado. Además del esfuerzo inmenso durante esta pandemia, cuidemos a los cuidadores. Y cuidadores dejaros cuidar más!
Gracias Llanos!!! En aprender a cuidarse y dejarse cuidar es en lo que ahora estamos trabajando. Muchos besos.
Tengo familiares enfermeros y llegaban a casa francamente desmoralizados y agotados física y emocionalmente, por no poder hacer más, por el descontrol y desconocimiento de la situación. Ha sido muy duro para todos, y también para los sanitarios porque han tenido que lidiar situaciones para las que no estaban preparados y lo han hecho, y lo están haciendo, muy bien. Por eso, en este fin del confinamiento, vamos a tener precaución para evitar volver a pasar por lo mismo y, de este modo, devolverles el cuidado que nos han dado de manera incondicional.
Así es Isabel, gracias por compartir esto. No todo el mundo ha tenido alguien cercano para conocer esta realidad, por eso hay que contarlo, porque ahí está. Te mando un beso muy fuerte y gracias como siempre por estar ahí 😉
Un lujo poder leer un artículo de personas que han estado (y están) en primera línea.
Especialmente me ha hecho reflexionar el concepto de «sociedad infantizada» y como los medios con su celo en «nuestra protección» puden provocar una sociedad más ignorante y que por tanto vuelva a cometer los mismos errores.
Gracias Edu!!! Ahora que se llama tanto a nuestra responsabilidad indivual y como sociedad para salir juntos de esta pandemia, me parece que es un concepto sobre el que reflexionar. Gracias de nuevo, ya sabes que me encanta tenerte también por estos lares 😉